Por: Javier Diez Canseco Cisneros
El tema del agua está en el ojo de la tormenta. Luego de Conga y la Marcha Nacional por el Agua, que los medios quisieron ignorar, se abre un nuevo frente en Lima. En la campaña, PPK propuso las Asociaciones Público-Privadas o concesiones, para avanzar en privatizar Sedapal. A diferencia del resto de las Empresas de Saneamiento del país, Sedapal es la perita en dulce: la gran empresa de agua potable del país que maneja 8 millones de usuarios: Lima. Gana Perú, en cambio, planteó fortalecer Sedapal y modernizar las EPS de provincias, que -en muchos casos- enfrentan graves problemas.
Los problemas de la privatización del agua en AL han sido graves. Precios que se disparan y conflictos sociales agudos: Chile, Argentina y Bolivia. Los dos últimos terminaron retirando a los concesionarios y retornando al servicio público luego de enfrentamientos. La experiencia en el Perú, Tumbes, ha sido muy mala, pero el negocio en Lima es apetitoso y está abierto. Varias actividades operativas de Sedapal y especialmente las comerciales (atención al público, cortes de medidores, cambios de estos a precios siderales, reparaciones, etc.) ya están tercerizadas, estas últimas en casi 70%. Parece que más del 50% del presupuesto de Sedapal va a pagar a privados.
Ahora está en curso, a cargo de Proinversión (que maneja el ministro Castilla), la concesión de la “Operación, Mantenimiento, Rehabilitación y Mejoramiento de Plantas de Tratamiento de Agua Residual (PTR) de Sedapal”, ratificando dos acuerdos de Proinversión de mayo 2011 y enero 2012. Así lo establece el DS 004-2012-EF. PPK, de gran olfato, dice que es un buen comienzo empezar por aquí y por la micromedición. Y para facilitar la operación se busca un Gerente General Ad Hoc para Sedapal, por lo que se habrían reducido las exigencias, eliminando la necesidad de un Título Profesional y limitándolo a un Bachillerato, y reducido los años mínimos en roles de dirección y supervisión con la intención, aparente, de colocar a la Jefa de Proyectos de Saneamiento de Preinversión en el cargo. Todo bajo control.
El manejo de las PTR fue materia de un estudio acordado por Sedapal y el Banco de Fomento Alemán KfW desde el 22 de mayo hasta el 8 de julio del 2011. Tres objetivos: 1) Incrementar el nivel de tratamiento de las aguas residuales en Lima; 2) Mejorar la disponibilidad de agua en el río Rímac; 3) Aumentar el reuso de las aguas residuales tratadas para el riego de parques y jardines.
La consultoría reveló los graves problemas existentes, desde la escasez de personal (trabajan 60 personas en PTR donde en Europa Central trabajarían mil para atender 8 millones de habitantes), presupuestos que cubren entre 20 y 25% de lo necesario, equipamiento muy diversificado y mal evaluado, exceso de residuos químicos e industriales en las aguas a tratar, etc. Pero KfW ofrecía 44 millones de euros y pedía de Sedapal 16 millones de US$ dólares para enfrentar el tema de las PTR.
A su vez, la Gerencia de Desarrollo e Investigación de Sedapal, en febrero del 2011, pone en claro lo que significaría la concesión de las PTR: 1) Sedapal debería pagar S/.60 millones anuales a concesionarios; 2) Los concesionarios deberían invertir S/.76.6 millones, pero si fuera Sedapal serían S/.41.6, es decir, 18.5 millones menos; 3) Los costos de los concesionarios no incluyen S/.5 millones anuales de personal que Sedapal debería asumir adicionalmente; 4) El costo unitario por metro cúbico-segundo tratado por la iniciativa privada es el doble de la PTR Tablada o el triple que la del Chira, es decir, más costosas; 5) Sería más beneficioso para Sedapal y los usuarios conseguir financiamiento más barato que el que ofrece la iniciativa privada; 6) Se recomienda continuar con las gestiones ante la Cooperación alemana KfW para financiar el plan de PTR; y 7) Sedapal requiere reevaluar tarifas y que el Estado le devuelva los millones que usó de dinero de la empresa para “Agua para Todos”.
¿A dónde nos lleva la concesión Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales, cuyos sobres se abren hoy? Lima tiene aquí un tema: un servicio (¿o negocio?) básico y sus costos para garantizar un derecho fundamental.
El tema del agua está en el ojo de la tormenta. Luego de Conga y la Marcha Nacional por el Agua, que los medios quisieron ignorar, se abre un nuevo frente en Lima. En la campaña, PPK propuso las Asociaciones Público-Privadas o concesiones, para avanzar en privatizar Sedapal. A diferencia del resto de las Empresas de Saneamiento del país, Sedapal es la perita en dulce: la gran empresa de agua potable del país que maneja 8 millones de usuarios: Lima. Gana Perú, en cambio, planteó fortalecer Sedapal y modernizar las EPS de provincias, que -en muchos casos- enfrentan graves problemas.
Los problemas de la privatización del agua en AL han sido graves. Precios que se disparan y conflictos sociales agudos: Chile, Argentina y Bolivia. Los dos últimos terminaron retirando a los concesionarios y retornando al servicio público luego de enfrentamientos. La experiencia en el Perú, Tumbes, ha sido muy mala, pero el negocio en Lima es apetitoso y está abierto. Varias actividades operativas de Sedapal y especialmente las comerciales (atención al público, cortes de medidores, cambios de estos a precios siderales, reparaciones, etc.) ya están tercerizadas, estas últimas en casi 70%. Parece que más del 50% del presupuesto de Sedapal va a pagar a privados.
Ahora está en curso, a cargo de Proinversión (que maneja el ministro Castilla), la concesión de la “Operación, Mantenimiento, Rehabilitación y Mejoramiento de Plantas de Tratamiento de Agua Residual (PTR) de Sedapal”, ratificando dos acuerdos de Proinversión de mayo 2011 y enero 2012. Así lo establece el DS 004-2012-EF. PPK, de gran olfato, dice que es un buen comienzo empezar por aquí y por la micromedición. Y para facilitar la operación se busca un Gerente General Ad Hoc para Sedapal, por lo que se habrían reducido las exigencias, eliminando la necesidad de un Título Profesional y limitándolo a un Bachillerato, y reducido los años mínimos en roles de dirección y supervisión con la intención, aparente, de colocar a la Jefa de Proyectos de Saneamiento de Preinversión en el cargo. Todo bajo control.
El manejo de las PTR fue materia de un estudio acordado por Sedapal y el Banco de Fomento Alemán KfW desde el 22 de mayo hasta el 8 de julio del 2011. Tres objetivos: 1) Incrementar el nivel de tratamiento de las aguas residuales en Lima; 2) Mejorar la disponibilidad de agua en el río Rímac; 3) Aumentar el reuso de las aguas residuales tratadas para el riego de parques y jardines.
La consultoría reveló los graves problemas existentes, desde la escasez de personal (trabajan 60 personas en PTR donde en Europa Central trabajarían mil para atender 8 millones de habitantes), presupuestos que cubren entre 20 y 25% de lo necesario, equipamiento muy diversificado y mal evaluado, exceso de residuos químicos e industriales en las aguas a tratar, etc. Pero KfW ofrecía 44 millones de euros y pedía de Sedapal 16 millones de US$ dólares para enfrentar el tema de las PTR.
A su vez, la Gerencia de Desarrollo e Investigación de Sedapal, en febrero del 2011, pone en claro lo que significaría la concesión de las PTR: 1) Sedapal debería pagar S/.60 millones anuales a concesionarios; 2) Los concesionarios deberían invertir S/.76.6 millones, pero si fuera Sedapal serían S/.41.6, es decir, 18.5 millones menos; 3) Los costos de los concesionarios no incluyen S/.5 millones anuales de personal que Sedapal debería asumir adicionalmente; 4) El costo unitario por metro cúbico-segundo tratado por la iniciativa privada es el doble de la PTR Tablada o el triple que la del Chira, es decir, más costosas; 5) Sería más beneficioso para Sedapal y los usuarios conseguir financiamiento más barato que el que ofrece la iniciativa privada; 6) Se recomienda continuar con las gestiones ante la Cooperación alemana KfW para financiar el plan de PTR; y 7) Sedapal requiere reevaluar tarifas y que el Estado le devuelva los millones que usó de dinero de la empresa para “Agua para Todos”.
¿A dónde nos lleva la concesión Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales, cuyos sobres se abren hoy? Lima tiene aquí un tema: un servicio (¿o negocio?) básico y sus costos para garantizar un derecho fundamental.
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